En estos días salió la publicación del Global R&D Funding Forecast de la revista R&D Magazine, uno de los estudios más esperados del año. Este es un estudio clásico desde 1959.
Las inversiones en I + D son la clave de la innovación, y las inversiones a largo y corto plazo realizadas por la industria, el gobierno y la academia para este 2018 no son menos importantes que para cualquier año anterior. Estas inversiones a menudo son cruciales para garantizar el crecimiento económico a largo plazo e incluso la supervivencia de muchas organizaciones. Para 2017, estas organizaciones se han enfrentado a presupuestos ajustados y nuevas reglamentaciones, problemas de seguridad de los datos, recursos limitados, tecnologías que cambian rápidamente, una mayor competencia, mayores limitaciones medioambientales y costos cada vez mayores. Es hora de hacer un balance de dónde se encuentra la I + D a escala global y en todas las industrias.
El Global R&D Funding Forecast de I + D de R & D Magazine, publicado desde 1959, es un indicador significativo de las tendencias futuras y proporciona información clave e información no duplicada que examina los desafíos específicos para los posibles ganadores y perdedores de I + D en 2018 y las posibles consecuencias a corto y largo plazo de estas inversiones. Este informe exclusivo proporciona datos confiables en más de 100 países, junto con resúmenes sobre tendencias del sector industrial, investigación académica y regiones específicas de tecnología «caliente» en todo el mundo, así como planes de gastos detallados de las agencias gubernamentales de EE. UU.
El resumen de este estudio es el siguiente:
La I+D global sigue creciendo, superando por tercer año los dos billones de dólares. Asia asume el 44% de la inversión mundial en I+D. El centro del mundo, a nivel demográfico, económico, industrial, tecnológico y científico, se encuentra ya en el triángulo que forman Shangai, Tokyo y Seúl. Estados Unidos, que acaparaba un tercio de la inversión global en I+D hace una década, ahora, pese a ser todavía el líder en esfuerzo tecnológico bruto, ejecuta poco más de una cuarta parte de la I+D mundial. Mientras, la inversión China alcanza el 85% de la americana. La proporción de I+D europea sigue cayendo, del 21,00% (2017) mundial, al 20,52% (2018). África, la gran olvidada, sólo es capaz de ejecutar el 0,92% de la I+D del planeta. Para que tengan una referencia en el caso de los países de la Región, por ejemplo Costa Rica se ubica en la posición 85 con una inversión de $0.46 billones de dólares para este 2018 muy poco si lo referenciamos a México como líder entre los países latinos con una inversión de $12.01 billones de dólares.
Más de dos terceras partes de la inversión en I+D se hace en empresas, entre las cuales destacan cada vez más las TIC. En los próximos diez años, se espera que la inteligencia artificial, la robótica avanzada y los sistemas de información transforman el panorama económico, las dinámicas de investigación e innovación, y la sociedad global en su totalidad. La carrera de I+D se acelera, con una previsión de incremento mundial de la inversión del 4,4% en 2018, frente al 3,4% de 2017.
En Europa, se consolida el modelo mittelstand (clústeres innovadores de pequeñas y medianas empresas, tecnificadas, especializadas y exportadoras). Alemania, Suiza y Austria son el máximo exponente de este modelo, derivada del capitalismo social nórdico. Austria se consolida como la última gacela europea, con una inversión en I+D/PIB que supera el 3% y se acerca a Suecia, y Japón. Francia parece resistirse a caer (2,24% I+D/PIB), mientras el Reino Unido queda ligeramente por detrás (1,75% I+D/PIB). España e Italia siguen hundidas en la pereza innovadora, y se acercan ya más a la zona de países emergentes que a la de renovadas potencias industriales. La I+D mundial está sufriendo un proceso de concentración: una cuarta parte está en manos de Estados Unidos. Casi la misma proporción, en manos de China. Japón, Corea del Sur y la Europa del Norte y Central asumen otro 25%. Hasta una cuarentena de países (entre ellos España, Italia, Irlanda, Republica Checa, India, Rusia, Canadá e Israel) se reparten el último cuarto. En los 150 países del mundo restantes, la I+D es casi inexistente.
La burbuja China crece segundo a segundo. Sigue los pasos que Japón inició en 1945, y Corea del Sur veinte años después. El modelo asiático en diez años, China será una inmensa bola en la posición en que hoy están Japón o Corea del Sur, asumiendo (si sigue el ritmo de desarrollo actual y si los europeos y los americanos seguimos despistados), el 75% de la I+D mundial.
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