En el mercado de hoy en día, donde las compañías existentes se ven compitiendo con nuevos jugadores disruptivos tales como: AirBnB, UBER, Facebook, Alibaba, Amazon, etc… Estas nuevas empresas se apropian del mercado esencial de las organizaciones existentes y amenazan con modificar radicalmente el funcionamiento de ese mercado.
Las empresas tradicionales o incumbentes se enfrentan a una elección: ¿siguen fieles a su antiguo modelo, con lo que corren el riesgo de quedar obsoletas, o adoptan el nuevo modelo de negocio disruptivo para competir?
Conocemos los casos como las aerolíneas de bajo coste, como Ryanair y EasyJet, redefinieron las expectativas de los clientes y dieron un vuelco al mercado. Las aerolíneas convencionales, como British Airways, Delta Airlines, para poder competir, se vieron obligadas a introducir también ofertas de bajo coste, lo que suponía adoptar un modelo de negocio radicalmente diferente. Pero, para British Airways y Delta, esto no funcionó.
Si tomamos Delta Airlines como caso para análisis, podríamos afirmar que operó bajo un modelo de aerolínea tradicional y se diversificó hacia un modelo no relacionado de aerolínea de bajo coste con Delta Song, la cual resultó ser fundamentalmente diferente del modelo tradicional, lo que creó lógicas de negocio incoherentes en el seno de la empresa y aumentó el riesgo de que el director interfiriera de forma inefectiva. Como ejemplo, los directivos de la sede central no fueron capaces de permitir que Delta Song tomara sus propias decisiones respecto a la programación y las tarifas, adaptándolas a las exigencias de su modelo de negocio de bajo coste. El nuevo modelo fracasó, y Delta Airlines tuvo que desprenderse de su línea aérea de bajo coste.
Por eso a medida que las empresas adopten maneras de operar disruptivas para poder competir en mercados que se encuentran en rápida transformación, saber cómo gestionar modelos múltiples en paralelo puede ser lo que diferencie las organizaciones que tendrán problemas de las que tendrán éxito.
Hay que tener en cuenta que la tecnología se ha convertido en un elemento transformador en potencia que ya se aplica para optimizar procesos, automatizar servicios, hacer más eficiente el encuentro entre oferta y demanda o eliminar intermediarios, y que promete muchos más beneficios en los próximos años, provocando innovación disruptiva.
Modelos de negocio
Las tecnologías emergentes como: Inteligencia Artificial, Internet de las Cosas, la robotica, el Blockchain, los VANT (vehículos aéreos no tripulados) y la realidad virtual y aumentada han dado paso a nuevos modelos de negocio que están cambiando la economía, nuestras expectativas y nuestro comportamiento. Este proceso responde a una dinámica clara, a una estructura que se ha dado a lo largo de todas las olas tecnológicas y que sigue un proceso que empieza con: (1) un avance científico, (2) que se materializa en una nueva tecnología, (3) que llega al mundo de los negocios, (4) y cambia la organización económica y/o social.
Hay una gran variedad de modelos de negocio disruptivos que están surgiendo, pero por su relevancia e impacto, prefiero señalar a continuación los 4 más importantes: a) Los derivados de la transformación digital de las empresas b) el modelo economía de plataformas c) El modelo descentralizado y d) La economía pop-up y de mercados superfluidos.
La transformación digital provoca la generación de nuevos modelos de negocio
La transformación digital de las empresas es uno de los grandes temas actuales. Con base en la amplitud que proporciona la transformación digital, diríamos que allana el camino y brinda la oportunidad a las empresas para innovar e introducir en las corporaciones nuevos modelos de negocio.
Aunque aún se están determinando cuáles serán los negocios afectados por esta digitalización, lo que está claro es que las empresas deben afrontar un cambio de estrategia, y debe trasladar los recursos a nuevas iniciativas digitales, rediseñar la organización y transformar su cultura si no quieren quedarse atrás. De esta forma, podrán aprovechar la oportunidad de creación de valor que la innovación disruptiva representa, en vez de verla como una amenaza.
En este apartado me gusta siempre citar el caso de éxito que ha tenido Domino’s Pizza en transformación digital. Esta enorme empresa, con más de 15.000 establecimientos repartidos por todo el mundo, puede presumir de ser líderes en Pizza Delivery en todo el mundo. La fórmula de su éxito reside en la mejora de sus productos en base a las opiniones de sus clientes a través de las redes sociales como fuente principal de información. Unido a la adaptación digital que han realizado (se pueden realizar pedidos desde cualquier dispositivo: smartphone, smart Tv, smartwatch… Tanto es así que la mitad de sus pedidos son online).
Plataformas de economía colaborativas
En este sentido, observamos los modelos de negocio P2P (persona a persona), o de economía colaborativa. Son nuevos modelos de negocio basados en plataformas o apps que operan bajo demanda y que normalmente digitalizan una actividad que ya se hacía de forma analógica, ya sea con ánimo de lucro o no. Eliminan de la ecuación a la empresa intermediaria, que es sustituida por la plataforma que facilita la conexión con quien presta el servicio o tiene el bien a adquirir.
Este nuevo modelo permite aprovechar recursos infrautilizados; ponen en el mercado nuevos productos y servicios; facilitan la mejor opción oferta y demanda; aceleran la innovación; crean demanda y nueva actividad, y dinamizan el mercado. Además, ofrece una reducción de precios o en una mejor calidad y variedad de los servicios, también de los prestados por los actores tradicionales. Los casos de éxito en este tipo de plataformas son: AirBnB o UBER, aludiendo a las externalidades negativas asociadas a estos en temas de competencia, regulación, impuestos.
Modelo descentralizado
Los consumidores ya no necesitan de una entidad intermediaria que centralice la provisión de bienes y servicios, sino que pueden hacerlo directamente entre ellos, a través de las plataformas.
Uno de los grandes nichos del modelo P2P es el crowdfunding, que facilita las aportaciones económicas entre pares. Hay de diversos tipos: de donación; de recompensa (la persona que aporta recibe una compensación que el beneficiario establece); equity crowdfunding (inversión) o crowdlending (préstamos).
Estos modelos son ya parte de la revolución fintech que amenaza al sector bancario. Desintermedian el proceso y lo descentralizan, sin necesidad de entidades financieras de por medio (aunque sí de una plataforma). La tecnología utilizada en un alto porcentaje en este tipo negocios financieros mencionados es la Blockchain. Como sabemos; la moneda Bitcoin es una moneda digital que utiliza el cifrado criptográfico como sistema de seguridad y de lucha contra la falsificación. Es la primera de este tipo que puede operar sin necesidad de bancos o de una autoridad central, sin revelar datos sobre la identidad de quienes realizan las transacciones.
Modelo de mercados superfluidos
El desarrollo tecnológico ha hecho posible crear una StartUp en un día, montar una tienda de ventas en internet en unas horas.
Todo en menos tiempo, más económico y extraordinariamente más fácil que hace una década. La tecnología está creando nuevos mercados superfluidos (muy ágiles, sin resistencia ni fricción y costes de transacción cercanos a cero) y transformando las empresas y mercados tal y como los conocíamos.
La facilidad para obtener información y tomar decisiones, la interconexión y la automatización, la robótica y las nuevas modalidades de fabricación están modificando industrias y sectores completos. Modificando productos y servicios a una velocidad cada vez más vertiginosa.
Es necesario señalar que este tipo de empresas utilizan la nuble para hospedar su negocio, utilizan programas de Open Source para su gestión y las plataformas de comercio y pago electrónico para realizar sus transacciones por Internet.
Conclusiones
Desde una perspectiva empresarial, el impacto de los modelos de negocio disruptivos es claro: industrias y sectores financieros, de seguros, de transporte, fabricantes de automóvil, hotelera o aeroespacial están sitiadas por las nuevas StartUps que amenazan su negocio y que aceleran un inevitable cambio. Sin embargo, ¿hasta qué punto son estas una amenaza? ¿No tienen los operadores históricos mejores defensas?
Los expertos creen que el panorama es más favorable para las grandes empresas, que no dejan de crecer. Así sucede, por ejemplo, con el caso de la industria hotelera, que proyecta un futuro de éxito continuo. No obstante, los hoteleros se enfrentan a una necesaria renovación y transformación de la que, a menudo, son conscientes, y en la que están tomando parte. Algunos eligen innovar y otros ejercer presión para imponer lo que puede considerarse como barreras de entrada a los nuevos modelos de negocio.
Otro debate que se plantea en torno a la sustitución de empresas intermediarias por plataformas y acerca de la desintermediación que facilitan tecnologías como Blockchain es cómo se percibe un mercado desintermediado que se organiza directamente entre consumidores y proveedores, sin necesidad de una autoridad central.
Desde luego, la tecnología ya lo permite, pero el sistema, a menudo paraliza y es un obstáculo a su aplicación. Ejemplo de ello son los casos de UBER y AirBnB en España, donde se ha limitado por ley su actividad. Las autoridades de competencia tanto de la Unión Europea como de Latinoamérica alza la voz en este sentido, que no se pongan barreras de entrada a estos nuevos actores y se solicita a los legisladores que garanticen el derecho a la innovación tecnológica, incluso si esta supone un reto a la forma tradicional de hacer negocios, sobre todo teniendo en cuenta que las nuevas tecnologías pueden mejorar la eficiencia en favor de los consumidores. Un punto a favor en este tipo de modelos, es que cuentan con mecanismos de confianza basados en sistemas de reputación digital que permiten puntuar, valorar y comentar los servicios usados o bienes prestados y las personas con quienes se realizan las transacciones.
De esta manera, se transforma la manera en la que nos relacionamos y cómo consumimos. La confianza del servicio pasa a ser algo más medible mediante la reputación que se valora a través del internet.
DESEAS COMPARTIR TUS IDEAS CON NOSOTROS?