Esta vez quería compartirles una herramienta que compone el ecosistema de innovación a partir de la cual las startups trabajan aplicándolas en sus propuestas. En mi caso; les puedo contar que he aplicado dicha herramienta en varios de los proyectos innovadores que he desarrollado consiguiendo resultados muy positivos, sobretodo en la validación del producto y/o servicio antes de salir al mercado.
Pero vamos! Profundicemos en el tema… este método es utilizado mucho por los emprendedores para validar su iniciativa innovadora y poniendo el foco en las necesidades del cliente, contando con su retroalimentación e ir modificando el producto hasta desarrollar la versión final. Es el concepto de moda en el mundo emprendedor, donde las pautas y recursos para desarrollar un proyecto son muy diferente a hacerlo en una gran compañía.
“No debemos enamorarnos de nuestro proyecto porque entonces no veremos los fallos que tiene”
Ir adaptando el producto a lo que el mercado demanda y no a nuestra propia visión, es lo más acertado a la hora de lanzar algo nuevo.
El origen del método lean startup
El concepto originario viene de Steve Blank, emprendedor y mentor de Silicon Valley, cuando comenzó a desarrollar una metodología de validación de productos basado en el desarrollo de cliente (Customer Development), que consiste básicamente en saber si nuestro producto cubre sus necesidades o deseos.
Posteriormente, Eric Ries, alumno y discípulo de Steve Blank, lo popularizó en su libro “EL MÉTODO LEAN STARTUP”, donde dio forma a estas ideas construyendo una metodología aplicable a todo tipo de nuevos proyectos.
¿En qué consiste el método lean startup?
Es una metodología basada en “aprendizaje validado”, es decir, ir validando poco a poco las hipótesis antes de tener el producto final y comenzar a escalar el negocio (startUp).
Vamos definiendo y acortando los ciclos de desarrollo, lanzando distintas propuestas por un periodo de tiempo y obteniendo una retroalimentación muy valiosa de nuestros potenciales clientes, con los que mejorar la siguiente versión final del producto.
Con esta metodología se deben aplicar 3 técnicas:
- Desarrollo de clientes: (customer development): Comprobamos si nuestro producto satisface las necesidades del cliente. Para ello, salimos a la calle y preguntamos a los que serían nuestros clientes potenciales, les enseñamos el producto, que lo prueben y nos den sus más sinceras opiniones. Así se va construyendo el producto final, pensando siempre en el cliente final.
- Modelo de negocio: (Canvas): Esto es algo que detalle en un artículo anterior. Y consiste en visualizar y diseñar un modelo de negocio dinámico y visual, plasmado en un lienzo denominado Canvas por Osterwalder. Está dividido en cuadrículas, cada una dedicada a un aspecto fundamental del modelo de negocio: propuesta de valor, ingresos, gastos, canales de adquisición… En estas cuadrículas se van añadiendo y quitando ideas continuamente hasta tener una versión final.
- Técnicas ágiles o scrum: Consiste la aplicación de técnicas de comunicación y desarrollo de producto de manera dinámica y rápida para proponer ideas, mejoras e ir configurando el proyecto final en un equipo de trabajo. Se pueden utilizar software de gestión de proyectos para organizar las tareas o reuniones cortas y concisas para evaluar el trabajo del día anterior y el que se va a hacer ese día, son algunos ejemplos de estas técnicas.
El ciclo lean startup
Hasta que un producto no está validado por una serie de clientes no debería salir al mercado.
“Si te equivocas hazlo pronto y barato” dice Eric Ries. Es una de las premisas del método lean-startup, donde la idea de negocio se va mejorando a base de prueba y error. Cuando antes detectemos el fallo, menos costos y repercusiones tendrán solucionarlo.
5 Pasos fundamentales en el método lean start up
- Plantea una hipótesis
Parte de un problema a resolver y explica por qué estarían dispuestos a pagar por tu oferta. Para identificar el problema/dolor, podemos realizar una serie de entrevistas a nuestros clientes potenciales e identificar qué les preocupa realmente. Debemos saber si el problema es lo suficientemente doloroso para atacarlo.
- Valida la hipótesis
Desde crear un producto o servicio con las características mínimas básicas para comprobar si es lo que el mercado quiere hasta una demostración de cómo funciona, todo es posible. El objetivo es saber si la gente lo querría y lo compraría. Esta primera validación será de los “early adopters”, los primeros usuarios que lo utilizarán y los más susceptibles de probar cosas nuevas en nuestro sector.
- Mide la hipótesis
La mejor manera de saber qué métricas implementarás es identificando cuáles son los pasos a seguir para llegar hasta tu oferta y cuántas veces recurrieron a ellos para comprar. Es fundamental identificar los KPI de un producto, medirlas para saber si cumplimos objetivos y vamos perfeccionando nuestro producto.
- Genera un aprendizaje validado
Significa que en el camino se han realizado ajustes y cambios tanto en el producto o servicio, como en el mercado, proveedores… aprendiendo del entorno al que va dirigido el producto. Es fundamental saber escuchar a todos los stakeholders (Personas implicadas directa o indirectamente en el producto/servicio) e incorporar su retroalimentación (feedback)
- Ciclo repetitivo
Pones en marcha los pasos anteriores una vez más ya con un producto o servicio mejorado y volvemos a empezar.
Lanzamiento del “Mínimo Producto Viable (MVP)”?
Si aplicamos los pasos anteriores del método lean startup, el resultado que obtenemos es lanzar, primero un Mínimo Producto Viable o prototipo (MVP): Un producto muy básico, con las funcionalidades esenciales y testeamos que reacción tiene nuestro público objetivo.
Con su retroalimentación, reconstruimos y mejoramos el producto y lanzamos una nueva versión: MVP2 y realizamos el mismo proceso.
Así varias veces para ir puliendo el producto entorno a lo que el cliente demanda e identificar por qué está dispuesto a pagar para que nuestro producto/servicio tenga éxito.
¿Qué significa pivotar?
Cambiar aspectos significativos del negocio e ir a otro nuevo, bien a atacar otra necesidad, cambiar el modelo de negocio, la propuesta de valor…
¡Pivotar no significa fracasar con tu idea! Pivotar significa darse cuenta a tiempo de que ese negocio no tiene futuro y hemos identificado algo en lo que podemos tener más éxito.
Si nos empeñamos en seguir con un proyecto que no tiene futuro, que el cliente no necesita y no está dispuesto a pagar, por muy bien que lo tengamos diseñado, no tenemos negocio y acabaremos fracasando. Este es el objetivo del método lean startup.
QUE OPINAS AL RESPECTO?